El grupo municipal IU-Podemos Torrelavega ha solicitado formalmente al equipo de gobierno la convocatoria de una consulta popular para decidir sobre el futuro de la polémica Ruta del Cuaternario proyectada en el Monte Dobra, en el marco del Plan de Sostenibilidad Turística financiado por fondos europeos.
Desde la coalición denuncian que el proyecto, que contempla esculturas de animales prehistóricos, señalización y actuaciones sobre caminos, ha sido promovido “de espaldas a los vecinos y vecinas y sin transparencia alguna”. Su portavoz, Borja Peláez, ha sido tajante: “Lo mínimo en una democracia es preguntar antes de modificar un espacio protegido que pertenece a todos y todas”.
IU-Podemos ya presentó un recurso de alzada contra la licitación del proyecto por considerarlo incompatible con el planeamiento urbanístico y la protección ambiental vigente del Monte Dobra. Según recuerdan, la Modificación nº 53 del PGOU prohíbe expresamente “la creación de nuevas pistas y construcciones en la Zona de Protección Ecológico-Patrimonial del Pico de la Capía”, donde se sitúa la ruta.
A esta situación se suma la reciente licitación para el aprovechamiento cinegético de un terreno municipal que coincide parcialmente con el trazado del parque del Cuaternario, lo que IU-Podemos considera “un completo despropósito”. Según Peláez, “vamos camino de tener un parque temático cerrado a cal y canto durante la temporada de caza por razones de seguridad, y eso si no ocurre una desgracia antes”. La Ley de Caza de Cantabria prohíbe el acceso del público a zonas donde se celebren batidas, lo que dejaría inutilizado el parque en buena parte del año y supondría un grave riesgo para senderistas, familias y visitantes.
Para Peláez, el proyecto no solo es ilegal sino también innecesario: “¿A quién beneficia esto realmente? Desde luego no a los vecinos y vecinas, que llevan años protegiendo este entorno”. El portavoz insiste en que el monte Dobra no puede convertirse en “un parque temático al servicio de empresas privadas mientras se ignora la normativa y el sentir popular”.
Además, critica la falta de participación pública en un asunto que afecta directamente al uso y conservación de un entorno natural emblemático: “Pedimos al Ayuntamiento que respete a sus vecinos y vecinas y escuche antes de seguir adelante. Si no están dispuestos a frenar el proyecto, al menos que consulten al pueblo”.
IU-Podemos considera que una consulta popular vinculante es el único mecanismo democrático capaz de resolver un conflicto que ha generado una creciente oposición vecinal, especialmente tras conocerse que la ruta se solaparía con el nuevo coto de caza autorizado en la zona.
“No queremos que toquen el Dobra”, concluye Peláez, resumiendo el sentir de una parte importante de la ciudadanía torrelaveguense.