El concejal de la coalición ha pedido que el equipo de Gobierno dé cuenta en la próxima Comisión de Desarrollo Sostenible de todo lo que se planea hacer para garantizar las necesidades de los vecinos afectados.

El concejal de la coalición Unidas por Santander, Miguel Saro, ha reclamado al equipo de Gobierno que dé cuenta de todas las actuaciones que planea llevar a cabo el Ayuntamiento de Santander, tanto en inspección urbanística como de actuaciones de emergencia, derivadas del derrumbe del aparcamiento de las viviendas de protección oficial de GESVICAN de la calle Luciano Malumbres y Francisco Tomás y Valiente el pasado día lunes 13 de enero.

Así, Saro ha solicitado por escrito que se informe de todo lo realizado en la próxima Comisión de Desarrollo Sostenible, a la espera de conocer los resultados de la investigación que determine la causa real del derrumbe, que podría haber ocasionado daños personales muy graves a los vecinos.

“Es necesario poner negro sobre blanco en qué actuaciones va a acometer el Ayuntamiento de Santander, dentro de su ámbito de competencia, para atender las necesidades de este barrio, que va a ser afectado por la imposibilidad de utilizar parte de sus equipamientos, como son las zonas de recreo infantil y los garajes”, ha asegurado el edil de la coalición que representa a Izquierda Unida, Podemos, Equo y Santander Sí Puede.

Para poner contexto a la situación, Saro ha recordado que esta zona se urbanizó después de que el Plan General de 1997 recalificara unos suelos que eran de uso industrial y portuaria y que, por tanto, constituían la zona más razonable de expansión del puerto de Santander. Todo ello pasó a zona residencial y comercial y supuso “un evidente pelotazo urbanístico para los propietarios de los suelos”, especialmente Nueva Montaña Quijano, actual Gloobal Steel Wire, que entonces era una sociedad que entonces estaba endeudada con el banco Banesto.

“Esto muestra que la mayor parte de las actuaciones no son para crear un modelo de sociedad y de ciudad compatible con un uso por todos nuestros vecinos sino para atender las necesidades de unos pocos, que son los que realmente influyen en la ciudad”, ha lamentado Saro.