Izquierda Unida de Cantabria alerta de la pérdida de viajeros del ferrocarril en la comunidad, que cifran en un 30% en el período 2003-2016 y lo achaca a la pérdida de calidad “por culpa de las externalizaciones” en el ente público.

Sergio Tamayo, trabajador del ferrocarril y dirigente de la formación de  izquierdas, denuncia “las continuas externalizaciones” que se están realizando en RENFE, FEVE Y ADIF, en servicios como talleres, venta de billetes, limpieza o reparación de vías y obras”.

Además de estos servicios, afirma, “recientemente han dejado de gestionarse desde el ente público más servicios”, como el reportaje de trenes, el movimiento de trenes desde los talleres hasta la estación y la realización del enganche de vagones en mercancías.

“Todos estos servicios los realizaba personal de la empresa pública RENFE-FEVE Y ADIF y todos los pasos dados por la Administración apuntan a una privatización del ferrocarril público”, señala Tamayo.

Desde IU consideran que este tipo de externalizaciones “además de restar calidad y confianza en el servicio, genera perjuicio a los trabajadores” como demuestra la reciente sentencia en la que se condena a la empresa RENFE-FEVE, por la vulneración de derechos de los trabajadores y se la obliga a la contratación de dos trabajadores despedidos de una empresa privada, TRANSERVI, que hacia trabajos en los talleres de mantenimiento de FEVE, en Santander, por denunciar su situación ilegal e irregular.

Tamayo muestra su alegría porque la sentencia ha resultado favorable para estos dos trabajadores, quienes “han pasado por este mal trago y viven en una incertidumbre continua junto al resto de las plantillas en esta situación, en el ferrocarril y en otros sectores”.

“Desde IU venimos denunciando desde hace mucho tiempo las políticas privatizadoras que está realizando el gobierno del Partido Popular -y anteriormente el PSOE- en este sector”, defiende el dirigente de la formación, quien considera que “dichas políticas privatizadoras, sólo buscan deteriorar el servicio público de transporte por ferrocarril y hacer ganar dinero a los directivos de las empresas privadas que en muchos casos están comandadas por antiguos directivos de RENFE-FEVE-ADIF”.

También critica que “los beneficios de unos pocos en sillones son a costa de sueldos de miseria para los trabajadores de base, ya que algunos no llegan a los 900 euros, y con contratos de obra y servicio”.

Así, consideran que el maltrato a los trabajadores con sueldos ínfimos o la falta de contratación de personal público que reemplazase las jubilaciones durante los últimos 15 años, “ha provocado que el ferrocarril llegue a estar en la UVI”.

Tamayo afirma que los trabajadores han notado esta situación especialmente en las cercanías de FEVE, donde “las cancelaciones de trenes por falta de maquinistas, los continuos retrasos  por las averías tanto, por no haber material disponible o  por la falta de personal de mantenimiento, han provocado un continuo quebradero para los usuarios, llegando el punto de abandonar el viajar por ferrocarril”.

Según los datos, de los 4 millones de viajeros que utilizaban FEVE y del 1.200.000 que utilizaban RENFE en el año 2003 en Cantabria, se ha pasado en el año 2016, a 2.900.000  y 700.000, respectivamente.

“En poco más de una década los viajeros han descendido un 27,5% en FEVE y el 41,7% en RENFE, siendo el cómputo general un descenso del 30,7%”, lamenta Tamayo, e insta a las autoridades pertinentes a que “revisen su escala de prioridades” para poder recuperar la “fortaleza del ferrocarril público, social, ecológico y de calidad”.