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Os voy a pedir el voto para la candidatura de izquierda que encabezo en Santander y lo hago porque es algo importante y necesario para esta ciudad. Tu voto servirá para ayudar a poner en marcha una nueva Santander con oportunidades para todos, que no expulse a los jóvenes de la ciudad, que no empuje a sus vecinos más necesitados a las cunetas al paso del urbanismo depredador, que permita a todos disfrutar de servicios públicos eficaces financiados según la renta de cada vecino.

Algunos que llevan chupando mucho tiempo de la teta del poder están nerviosos, al creer que la gigantesca estructura clientelar al servicio de los intereses de una minoría, que ha venido desarrollando el PP en la capital en los decenios de su gobierno, pueda desmantelarse al perder su cómoda mayoría absoluta. Muchos se están moviendo en Santander para que el domingo echemos al Gobierno de la soberbia, la prepotencia y la insolidaridad, el caciquismo y la ignorancia. En suma, a los de los sobres.

Íñigo de la Serna, el alcalde de las infografías y el hormigón, el de los patrocinios para su “milla de oro”, ayer mismo sembraba indisimuladamente puñados de miedo al utilizar el discurso de Ignacio Diego y Mariano Rajoy sobre la gobernabilidad que prime el mal conocido, del “robamos, pero menos de lo que os cuentan”, del “los demás son iguales pero no les conocéis”. El discurso de la desesperanza y del conformismo. Pero es el Partido Popular el que teme perder su poder, el que teme la gente que gobierna.

Para que algo cambie en Santander tenemos el domingo un instrumento perfecto que permite saltar sobre la decadencia de la ciudad, una herramienta con la que romper la dura costra del desaliento y la somnolencia que nos arrastra hacia el desastre. No es otra cosa que tu voto. Un solo voto sirve de mucho.

Para que el Gobierno de los mediocres y del amiguismo pierda es necesario que votéis a Izquierda Unida. Primero porque en el Ayuntamiento plantaremos batalla a la corrupción, a diferencia de otros que han estado allí y no han peleado. Segundo, porque cada concejal que entre en el Ayuntamiento representando a Izquierda Unida será un concejal que pierda el Partido Popular en su camino hacia el adiós definitivo del poder político absoluto en Santander, en parte, debido al sistema de atribución de restos de la Ley D´Hondt.

Por ello, si hay un voto que puede ayudar a formar una nueva mayoría para Santander, para una ciudad para todos, ese es el voto a Izquierda Unida