Izquierda Unida Santander recalca que esta “moda machista” no es nueva y exige protocolos efectivos en vez de la “prudencia” que ha pedido Gema Igual.
La formación pide reforzar la seguridad de estos eventos multitudinarios y ve como una irresponsabilidad que se cuelen jeringuillas en el recinto.

Tras conocer las denuncias sobre los pinchazos con supuestos productos químicos en el Reggaeton Beach Festival, de los que ha informado la prensa local, Izquierda Unida de Santander ha mostrado su preocupación por el auge de esta “moda machista” que pretende someter la voluntad de las mujeres y que impide celebrar con tranquilidad las fiestas, y ha exigido celeridad en la creación de protocolos para impedirlo.
“Resulta imposible disfrutar de un concierto si nos persigue el miedo a un pinchazo que nos anule la voluntad”, expresan integrantes de la dirección de la formación política. Esta “moda machista”, insisten, no es desconocida, si no que se está extendiendo por nuestro país, igual que lo hizo previamente en otros como Reino Unido o Francia.
Es por esto que exigen al Ayuntamiento de Santander que no pierda el tiempo en la puesta en marcha de todas las medidas posibles en los eventos multitudinarios. “Diferentes colectivos feministas han elaborado guías en redes sociales para informar sobre estas actuaciones, por lo que es un tema que preocupa a las mujeres y del que el Ayuntamiento debe tomar nota” explica Keruin P. Martínez, coordinador de Izquierda Unida en la capital cántabra.
El representante también ha lamentado que la actual alcaldesa de Santander, Gema Igual, pida prudencia en vez de trabajar cuanto antes con otras administraciones para plantear medidas urgentes “que protejan lo mejor posible a las víctimas de esta lacra”. “La prioridad ahora no es cuestionar si esto afecta a la imagen de la ciudad o no, porque está pasando en más lugares, si no tener unos protocolos actualizados y cuerpos de seguridad formados y concienciados”, ha continuado Martínez, “Esto es lo que permite no generar alarma social, la prevención sobre la relajación”.
Por su parte, la portavoz de Izquierda Unida de Santander, Carmen Martín, ha recalcado que “se tiene que garantizar en los festivales organizados con el beneplácito del Ayuntamiento que las y los jóvenes puedan disfrutar de su ocio sin miedo”.
Por ello, plantea la necesidad de coordinación entre las diferentes administraciones para establecer protocolos que impidan a los agresores actuar y que eviten la desprotección de las víctimas. “Estos protocolos resultan necesarios puesto que, sin ellos, las víctimas deben recurrir en exclusiva al auto cuidado y/o a la vigilancia grupal en los bares o locales en los que se producen los pinchazos”, ha comentado Martín. Además, para que estos sean ser efectivos, se requiere proporcionar una formación actualizada a los cuerpos de seguridad, públicos y privados.
Finalmente, desde la formación recalcan la necesidad de reforzar la dotación de seguridad en este tipo de eventos multitudinarios, ya que es una irresponsabilidad que se hayan podido colar en el festival objetos punzantes, además del supuesto líquido inyectado. “Es lamentable que no se pueda acceder al recinto con una botella de agua o un bocadillo, pero sí con algo tan peligroso como las jeringuillas o cualquier objeto punzante, lo cual demuestra que la prioridad es el negocio a costa de la seguridad de todos y todas”, apunta Carmen Martín.