Estimados señores/as:
En un contexto en el que la conectividad es un elemento crucial para el desarrollo sostenible de nuestras comunidades, resulta imperativo que reflexionemos sobre la importancia de no condenar, por omisión, a las zonas de baja densidad de población a un aislamiento forzado. Porque ese aislamiento no solo entorpece la movilidad de nuestros ciudadanos y ciudadanas, sino que también desincentiva la economía regional y destruye la cohesión social. Coincidiremos, pues, en que no podemos permitirnos permanecer de brazos cruzados ante una cuestión que forma parte del día a día de una parte muy importante de nuestros conciudadanos/as.
En este escenario, conscientes en Izquierda Unida de las carencias de transporte que padecen las vecinas y vecinos de, prácticamente, todos nuestros pueblos, entendemos que se debe subsanar la mencionada deficiencia; de hecho, para las organizaciones políticas comarcales, solucionar ese problema tiene que ser un desafío. A estos efectos, debemos recordar que existen diversas vías para actuar sobre las complejas dinámicas de movilidad de Cantabria.
Aunque también se puede obviar la cuestión, mirar para otro lado y dejar que, quien pueda, utilice un transporte privado que, por cierto, cada día se encarece más y más. Mientras los servicios públicos, sin recursos, van empeorando en calidad, y ello hace que la percepción que la gente tiene de las organizaciones políticas sea mala.
Así, en IU entendemos que, de ningún modo, en justicia, se puede dejar en la estacada a tantas personas que vienen exigiendo servicios tan necesarios. Y esta, lamentablemente, parece ser la vía que se está tomando desde el nuevo Gobierno de Cantabria: no hay más que contemplar la situación del ferrocarril de cercanías, de las redes de autobuses urbanos y de otras líneas regionales de comunicación. Y así, surgen las demandas de vecinas que están siendo negativamente afectadas por las referidas carencias, como es el caso de Estefanía Calderón. Y es que, si seguimos con los brazos cruzados, aún empeorarán más (aunque parezca imposible) servicios públicos esenciales.
Izquierda Unida, así como el resto de organizaciones políticas de ámbito regional, debemos plantear propuestas realizables al Gobierno autonómico sobre el problema que, en este caso, nos ocupa y preocupa. Porque todos sabemos, independientemente de nuestro color político, que las demandas relativas al transporte pueden y deben ser incrementadas, estableciendo conexiones regulares entre núcleos de población más amplios donde las referidas conexiones ya existen, particularmente de autobuses. Si queremos que nuestros ayuntamientos sirvan realmente para satisfacer efectivamente las necesidades de las vecinas y vecinos, hacer cómoda la habitabilidad en ellos, debemos establecer como prioridad la creación de enlaces de transporte común, útiles tanto para el trabajo, como para los estudios de nuestros jóvenes y/o para el ocio. Y quizá lo más importante, para facilitar, aunque solo sea en sus desplazamientos, las vidas a nuestros mayores en la última etapa de sus existencias.
Tampoco se deben pasar por alto las subvenciones ofrecidas por la autonomía de Cantabria en materia de transporte, que representan una fuente de financiación que se podría explorar. Como también sería interesante establecer convenios colaborativos con las empresas de transporte que operan en nuestras localidades, tales como Alsa, a fin de ampliar o redibujar las líneas de transporte existentes. Liderar en este campo, ahora que ya han pasado las elecciones, es tarea de las corporaciones municipales. No podemos permitirnos cuatro años más de inacción.
Seguramente ustedes argumentarán que, siendo ayuntamientos pequeños, poco pueden hacer, basando sus razonamientos en problemas presupuestarios, de personal u organizativos. IU consideramos que, para paliar ese tipo de insuficiencias, sería fundamental crear una mesa de transporte a nivel comarcal, donde los distintos actores involucrados podrían coordinar esfuerzos y recursos, así como se debería optimizar la eficiencia de los servicios de transporte en nuestras zonas de baja densidad. ¡Pónganse de acuerdo en los ayuntamientos, planifiquen, ejerzan presión y prioricen las rutas de transporte!
Por todo lo expuesto, Izquierda Unida de Campoo instamos encarecidamente a las corporaciones municipales de Reinosa, Campo de Yuso, Campoo de Suso y Campoo de Enmedio a no limitarse a ejercer la oratoria con más o menos fortuna, sino a pasar a la acción emprendiendo actuaciones concretas en el objetivo irrenunciable de evitar el aislamiento de nuestra comarca. En IU estamos convencidos que la creación de una mesa de transportes, la ampliación de las líneas y el transporte a demanda y/o la búsqueda de convenios son buenos conceptos sobre los que comenzar a debatir. Insistimos: más allá de los perjuicios individuales que están experimentando aquellos ciudadanos/as que, tristemente y como consecuencia de la ausencia de puestos de trabajo por la carencia de empleo en la comarca de Campoo, se ven obligados a desplazarse a otras localidades para conseguir sustento, el aislamiento progresivo de esta zona de la sur de Cantabria ha conllevado, en gran parte, la decadencia que venimos padeciendo.
¡¡¡ Señores ediles campurrianos, es hora de actuar, es el momento de trabajar, de demostrar un compromiso real y efectivo por el bienestar de nuestras vecinas y vecinos, por el progreso de nuestra tierruca !!! Así lo demandan los moradores de los pueblos de Campoo. Y les asiste toda la razón.
Reciban ustedes cordiales saludos.
Izquierda Unida de Campoo